Estoy muy agradecida de haber sido elegida la reina de la Sociedad Benéfica La Rioja este año, como hija, nieta y bisnieta de Riojanos, es un orgullo poder representar a mis raíces.

Pensar en La Rioja es familia, alegría, jotas, la calle Laurel, tapas, zurracapote, cosas que podemos encontrar “a este lado del charco” gracias a La Benéfica como decían mi bisabuelos.

Pertenecer a esta comunidad ha sido tener un pedacito de mi familia riojana aquí en Chile, mi bisabuelo fue director y mi abuela, Pilar Diez, la primera mujer directora. De niña asistí a baile infantil y luego anualmente participando en San Mateo vistiendo los trajes típicos, por esto y mucho más, una colectividad a la que le tengo mucho cariño.

Sin duda tener este pedazo de La Rioja en Chile es un lugar que nos hace sentir como en casa a todos los que tenemos corazón riojano y es un honor poder representarlo este año.

En primer lugar, quiero agradecer la oportunidad de representar a la colectividad Riojana, no dudo que la persona más feliz por verme aquí sería mi abuelo, quien nació y se crió en Vadillos de Cameros, pueblo de la hermosa Rioja. Él fue quien siempre nos habló de su pueblo e hizo que las celebraciones riojanas fueran parte de nuestra familia, introduciéndonos en esta comunidad.

Desde pequeño he participado en las actividades que se organizaban, conociendo la cultura y tradiciones de La Rioja. A medida que crecía me integré poco a poco al grupo joven de la colectividad, participando en San Mateo y en otras actividades organizadas para y por la colectividad riojana.

Hoy, ser parte de esta comunidad y de la Sociedad Benéfica La Rioja, es algo que me llena de orgullo, por lo que me encantaría seguir manteniendo y transmitiendo las costumbres y valores de mi familia riojana.